Los Vertederos, y los Rellenos Sanitarios son métodos que hoy se encuentran totalmente revaluados; esa es una de las principales conclusiones de la cumbre de París COP 21 (diciembre 2015) y de las cumbres posteriores. Los Rellenos Sanitarios deben ir disminuyendo hasta desaparecer, pues contribuyen enormemente al calentamiento global.

Enterrar materiales reciclables en el suelo, tiene muchos inconvenientes; se pierden materias primas que podrían aprovecharse. El no enterrar basura tiene enormes beneficios ecológicos. Es importante el aprovechamiento de materiales reciclables, pues enterrados demoran demasiado tiempo en degradarse.

Con la implementación del proyecto que ofrecemos, se logran dos cosas: recuperar materias primas y aprovechar la materia orgánica; se reingresan materiales a cadenas productivas y no se desperdicia la energía presente en todo aquello que ha tenido vida.

Tanto, la generación de lixiviados como los gases de efecto invernadero (GEI), se producen como producto final de la putrefacción anaeróbica de la materia orgánica. Ambas situaciones son muy difíciles y costosas de controlar. Para combatir esta situación, usamos la mejor forma: actuar antes y evitar que se produzcan los lixiviados.

Hoy llegan a los vertederos muchos materiales y allí se entierran. Uno de ellos es el plástico, el cual es indispensable para nuestra vida. El plástico está en todas partes. Como recipientes para el agua y la leche, envolviendo alimentos, como envases, etc. Si pensamos en que los usamos y los reutilizamos, podemos decir que no hay problema; pero ¿qué pasa cuando los enterramos?

Un estudio reciente, realizado por científicos de la Universidad de Leicester, UoL, (Reino Unido), menciona que actualmente se producen en el mundo 300.000 toneladas de material plástico cada año; dice allí que la superficie del planeta está siendo alterada notablemente por la producción de estos materiales de larga duración fabricados por el hombre, a consecuencia de lo cual estamos entrando en una auténtica edad de plástico.

A continuación, información importante sobre el tiempo que tardan algunos materiales en degradarse, cuando son enterrados.

PRODUCTO

DEGRADACIÓN

Vidrio 4.000 años
Pilas Más de 1.000 años
Poliestireno (PS) 500 a 1.000 años
PET 100 – 1.000 años
Plástico 500 años
Aluminio 350 – 400 años
Zapatos 200 años
Polietileno (PE) 150 años
Polipropileno (PP) Más de 100 años
Pañales desechables 100 años

PRODUCTO

DEGRADACIÓN

Encendedores desechables 100 años
Envases Tetra pack 30 años
Aerosoles 30 años
Madera pintada 12 a 15 años
Latas de aluminio 10 años
Goma de mascar 5 años
Cuero 3 – 5 años
Madera 2 – 3 años
Bambú 2 – 3 años
Colillas de cigarrillos 1 – 2 años
Celofán 1 – 2 años
Papel y cartón 1 año
Ropa de tejidos naturales 1 – 5 meses
Residuos orgánicos 1 semana – 4 meses (*)

(*) Siempre y cuando no se mezclen con desechos inorgánicos o sustancias químicas

En nuestro proyecto, utilizamos un Sistema completamente automatizado, el cual separa la materia orgánica de los residuos factibles de ser reutilizados (como insumos o materia prima), convirtiendo la primera, después de un proceso, en un producto patentado, denominado SE3™ (antes Fluff).

No se requiere pre-selección de residuos. Tenemos procesos automáticos con mecanismos especiales (magnéticos, neumáticos, de flotación, por densidad, etc.) para separar el material reciclable, entregándolos limpios para su comercialización posterior al por mayor, logrando de esta forma un mejor precio.