El hombre siempre se ha esforzado en obtener materiales con beneficios que no se encuentren en los productos naturales. Esa es una verdad a la que el plástico se ha adaptado mucho mejor que la mayoría de los productos que permanecen; es decir, ese es su gran secreto.

Antes del plástico, las resinas naturales eran utilizadas para diversos fines. Luego de un poco más de 100 años de investigaciones, en la década de los 50’s aparecieron diversos materiales plásticos, siendo el boom de este material, expandiéndose por todo el mundo. Tan es así, que algunos consideran que esta es la Edad del plástico, como analogía a otras etapas en la historia del hombre; desde confeccionar vestidos con nylon hasta envasar o hacer juguetes, etc.

Los productos hechos con plástico se han desarrollado velozmente, sumado esto a sus bajos precios al comparar con productos naturales. Gracias al perfeccionamiento de la tecnología, el uso del plástico ha ido incrementándose.

Hace más de 150 años, el plástico nació como solución a la escasez de materiales económicos, con poco peso, resistentes, seguros, irrompibles, flexibles, higiénicos y que pudieran aportar esterilidad en el medio hospitalario. La evolución del plástico empezó con el uso de materiales naturales que tenían propiedades plásticas intrínsecas, como la laca o la goma de mascar. Luego vino la modificación química de materiales naturales como el caucho, la nitrocelulosa, el colágeno o la galalita. Posteriormente, la gran diversidad de materiales completamente sintéticos que conocemos como plásticos modernos empezaron a aparecer; esto hace un poco más de 100 años.

  • En 1855 Alexander Parkes inventó la parkesina; hoy se conoce como celuloide.
  • El PVC fue polimerizado por primera vez entre 1838 y 1872.
  • En 1907, Leo Baekeland creó la baquelita, primer plástico realmente sintético fabricado en serie.

Desde el invento de Baekeland, se han creado y desarrollado muchos nuevos plásticos ofreciendo una amplia gama de propiedades deseables; los tenemos en la casa, en la oficina, en la fábrica, en el automóvil, etc.

Cada vez que se obtiene un material plástico nuevo, ocurre como una respuesta para aportar mejores prestaciones que las opciones existentes. El plástico es un material que se adapta fácilmente a las necesidades del hombre, algo difícil de alcanzar por otros productos.

Desafortunadamente hemos pecado por su mala disposición final, siendo el medio marino el más afectado. Allí su degradación es más perjudicial que en la tierra. Además, en ese lugar se recibe el mayor porcentaje de los deshechos plásticos. Según informes, llegan más de 200 kilos de plástico por segundo.

Todo esto tiene un pero. En el caso del plástico, los residuos de este material han sido mal gestionados, enterrados unas veces y abandonados otras, causando el grave problema que tenemos hoy. El mundo mira cada vez más absorto el grave problema en los océanos; hasta allá están llegando los residuos de plástico, engañando a peces que buscan alimentarse con el material; el daño se hace al ingerirlo y el plástico después llega al hombre.

No es posible ser ciegos, y pretender creer que la solución es prohibir el plástico. Se habla de muchas iniciativas, dentro de ellas la prohibición de las bolsas plásticas, y ahora el trámite de una ley que prohíbe el plástico de un solo uso (pitillos, cubiertos, platos, etc.).

Este es el momento de preguntar, ¿cual es el desarrollo que se ha efectuado para remplazar el plástico? La realidad, es muy difícil encontrar un producto con tantas propiedades para querer remplazarlo sin tener como hacerlo; pero más absurdo es prohibirlo sin tener listo su remplazo.

Ahora, si somos conscientes de que su problema está en su gestión, porque no trabajamos en ella? Es necesario que la industria, la dirigencia y los consumidores trabajemos unidos; facilitando infraestructura, fijando políticas y utilizando correctamente los materiales, aprovechando adecuadamente el valor de los residuos plásticos. Debemos pasar de un modelo de economía lineal (producir, usar, tirar) a un modelo circular (producir, usar, recuperar, reusar) realizando entonces un aprovechamiento eficiente de los residuos, que deben ser considerados como lo que verdaderamente son: recursos.

No se puede negar que los residuos mal gestionados o abandonados son la causa de las basuras marinas, pero es mucho más fácil avanzar en todas las formas de reciclado de los productos plásticos, lo que evitará de tajo la inaceptable situación de los plásticos abandonados en el medio ambiente.

Es paradójico entender la versatilidad de los plásticos; la gestión correcta del residuo impulsa que se aproveche todo su valor y evita que acabe dañando el medio ambiente.

Hoy en día existen muchas entidades que no solo destacan la adecuación de los plásticos a la Economía Circular por su capacidad para ser reciclados, sino que también explican las ventajas que se obtienen al usar el plástico, por ejemplo al conservar los alimentos en buen estado durante un mayor tiempo, mantenerlos libres de plagas, el salvar vidas en el sector de la medicina o la seguridad, el uso de muchas aplicaciones en la industria de la construcción en las que dada su durabilidad nos permite obtener importantes ahorros energéticos, o en el sector del transporte o la agricultura, donde se ahorran combustibles a través de la reducción de peso de los vehículos y agua gracias al micro riego. No pueden negarse las bondades del plástico de un solo uso al mantener condiciones de higiene o seguridad, indispensables en muchos casos.

Debemos apoyar las iniciativas de investigación y desarrollo que se adelantan buscando que productos y materiales se mantengan durante el mayor tiempo posible en un ciclo productivo.

La economía circular es la base necesaria para una apropiada disposición final de los residuos sólidos urbanos. La gestión adecuada de estos es la verdadera solución, pues su reincorporación a cadenas productivas es posible de alcanzar con el uso de tecnología, logrando así una disminución de los vertederos y el aprovechamiento máximo de recursos, objetivos de las Cumbres Mundiales de Cambio Climático.